Zamora 12 de septiembre del 2011

 

Estimado en el Señor. Muchas gracias por tu felicitación de cumpleaños.

Estamos a punto de comenzar  un nuevo curso.

Aprovecho para comentarte algunas de las realidades  de este verano.

Estuve  realizando un curso en julio sobre cocina  Internacional en Valladolid. Luego estuve en Santiago de Aravalle con los turnos de campamento donde han participado unos 130 jóvenes entre edades del 9 años en adelante. Días de actividad formativa, humana y espiritualmente.  Mi misión era cocinar. De esta forma  contribuimos a  que los jóvenes se alimenten sanamente para fortalecer su espíritu.

El 24 de julio  celebramos   un acto con motivo del 50 aniversario del nacimiento de la Milicia de Santa Maria. Nos dimos cita unas cuatro cientos personas  para dar gracias  a Dios con nuestros amigos por este medio siglo del nacimiento de  la Misia de Santa Maria. Tuvimos una misa de Acción de Gracias que presidió el Obispo de Getafe, estuvieron varios sacerdotes concelebrando.  Un antiguo militante  nos regalo una imagen  muy bonita que se bendijo. Luego tuvimos una  comida compartida, para terminar con un pequeño festival y un testimonio del bien que le había hecho la Milicia de Santa Maria en sus vidas. Fue un día extraordinario  que será difícil  olvidar.  Es del bien nacido ser agradecido.

Termino el día 29 el turno de campamento. El 30 nos juntamos varios primos y pasamos un día en familia.

Luego   en agosto comenzaba la gran aventura de la JMJ. Unos días en Zamora apoyamos en la diócesis para recibir a los 900 peregrinos que pasaron estos cinco días en la diócesis. En nuestra casa estuvieron cinco jóvenes Ingleses. Después  fuimos a Madrid a vivir  los días de la JMJ. Esto ha sido una revolución. La gente ha quedado  muy contenta y satisfecha. Todo el mundo la ha hecho lo mejor que ha podido.  Ahora cuando uno va hablando con la gente. Se ha trabajado muy bien. Madrid se ha volcado en todas sus instituciones, civiles, religiosas y Dios  se ha derramado en todos los participantes. Bastaba hablar con la gente y ver su entusiasmo.

 Un Obispo decía yo he participado en muchas Jornadas Mundiales, pero como esta ninguna. Bien organizado. Lo mejor será  leer ahora los discursos del Santo Padre y ver algunos de los videos de los distintos actos.

 Luego tuvimos un en encuentro en Santiago de Aravalle para poner en común estos días  de  la JMJ.
Terminamos con unos días  de Ejercicios Espirituales. Para  darle gracias a Dios por  la vida y dedicar  esos días  enteros para el Señor en Silencio y soledad. Allí el silencio te hace ver a la luz de Dios las cosas  que todavía podemos mejorar con su ayuda.

Pero con la gracia de Dios todo se puede sin ella, poco o nada.

He dado gracias  a Dios por los  50 años de  vida. Sin darme cuenta nacía al calor  de la Milicia de Santa Maria. Yo también he celebrado mi cincuenta cumpleaños.

 El  tres de septiembre día dedicado con mis amigos del pueblo para  celebrar los cincuenta años de vida. Aquí  tuvimos una misa, una comida compartida y un día de convivencia donde cada uno dio lo mejor de si para los demás.

Amigos son  los que en los buenos momentos acuden cuando se les llama: y en los malos momentos sin ser llamados.

Doy gracias  a la Virgen por todo lo que me hado a lo largo de estos cincuenta años, una familia, unida, salud,  fe,  esperanza, y caridad para compartir  todo y poder ser feliz con la ayuda de los que me rodean dando  lo mejor de  mi mismo en bien de los demás. Experimentando una vez mas que hay mas alegría en dar que en recibir.

El otro día  me envío un correo una religiosa Misionera  que vive en Colombia y que conocí en Perú en uno de los veranos misioneros. Me ha pedido ayuda para  poder colaborar con algunos proyectos que esta realizando en su Pais. Si crees que puedes echar una mano será bien recibida. Muchos pocos hacen muchos. Te adjunto los datos del banco donde puedes hacer el ingreso.  

Juan Luis Benito Rodríguez

Caja Duero  2104 0090 51 9131210249 y

 CAJA MADRID 2038 9414 39 6000127246

Así como la aurora es el fin de la noche, así el nacimiento de María es el final de nuestros dolores y el comienzo de nuestro consuelo R.Deutz 

 

Un saludo y gracias por todo.

Juan Luis Benito Rodríguez

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